11/08/2015

El dragón contra Casemiro

Imagen ilustrativa de Casemiro contra el Dragón
 Había una vez en un castillo donde vivían un rey llamado Ludovico, una reina llamada Mirta y sus hijos eran el príncipe Vidal, y la princesa Lucía, también convivía con ellos, un caballero llamado Lucas y su sirviente Augusto, cerca al reino existía una aldea. Y a diez kilometros del castillo, había una cueva donde vivía un dragón al que lo apodaban Lesly por una leyenda.

 Un día el rey llamó a varios aldeanos para poder elegir, quien luchase contra el dragón, entre ellos estaba Casemiro, un muchacho al cual le gustaba luchar, siempre quizo derrotar al dragón y ser un caballero de la mano derecha del rey. Mientras Ludovico miraba quién pudiese derrotar dijo, -Quisiera saber a quien le gustaria pelear ante el dragón, quien lo derrote, será mi segundo caballero y mi segunda mano derecha, ya que el primero es Lucas- el muchacho sonrió y dijo -Su majestad, yo derrotaré al dragón, solo quiero que me des con que luchar y un caballo al que llevar- El rey al escuchar el pedido llamó a Augusto y le ordenó, que busque la armadura, la espada y al caballo Terremoto el cual era de Lucas. Mientras los otros campesinos regresaban a sus chozas, Casemiro comenzó su aventura hacia la cueva, al llegar tuvo que escalar la montaña donde se encontraba la caverna, el dragón salió a defenderse pero Casemiro sin pensarlo fue y lucho con todas sus fuerzas, esquivando las llamaradas del dragón, logró derrotarlo. Al llegar al reino, le aviso las buenas noticias al rey, este le ordenó amablemente que se arrodille ante él, sacó su espada y frente a sus hijos, le puso la espada en un hombro luego en el otro  hasta llegar a su cabeza, mientras hacia esto decía las siguientes palabras: -Te nombro segundo caballero y mi segunda mano derecha, de este castillo-.

Finalmente organizaron una fiesta en honor a que Casemiro pudo derrotar al dragón que durante años, este quemaba los bosques y no dejaba cosechar a la multitud.

FIN

No hay comentarios.:

Publicar un comentario